NOTAS SOBRE UNA CONSPIRACIÓN SODOMITA by Eladi Romero García

autor:Eladi Romero García
La lengua: eng
Format: epub
editor: LAERTES
publicado: 2019-06-19T09:54:24+00:00

—Vaya, ¿seguro que Stalin no tiene nada que ver con el asunto? Aquí se menciona Rusia —insistió don Gabriel tras leer el documento.

—No, no... Ya le digo que todo es cosa de seres de otro planeta.

—Oiga, señor... Kalinin... Todo esto suena a chino. ¿De dónde ha sacado usted ese papel?

—Más adelante quizá se lo diga, aunque de momento no puedo revelar mis fuentes.

—Ya... ¿Y qué se supone que debería hacer yo para evitar la aparición de ese disco volante sobre Barcelona?

—Detener a Rey y a Buelta, ellos son los que están preparando el asunto.

—Pero, ¿cómo piensan hacerlo?

—Disponen de instrumentos de contacto que los propios marcianos les han proporcionado, destinados a señalar el lugar más adecuado para el aterrizaje de su nave. Será de noche, en un estratégico punto de la ciudad condal lo suficientemente próximo a los lugares del evento como para provocar el caos y hacer creer a los asistentes en una aparición mariana. Los pilotos del platillo necesitan de las coordenadas precisas para llevar a cabo la maniobra, y si usted ordena detener a esos dos tipos a tiempo, impedirá su luminoso aterrizaje.

El ministro, muy decepcionado con lo que acababa de escuchar —de hecho, comenzaba a considerar la opción de avisar a los loqueros—, resolvió despachar cuanto antes a aquel lunático. Luego ya ajustaría cuentas con su secretario por convencerle de que recibiera a semejante tipejo.

—De acuerdo, de acuerdo, déjeme ese documento, y le aseguro que nos pondremos de inmediato con el asunto. Ahora puede retirarse. Cuanto antes actuemos, antes evitaremos ese supuesto aterrizaje marciano.

—Muchas gracias por escucharme, señor ministro, no se arrepentirá. Y, sobre todo, estaca con esa gentuza, estaca y más estaca. Ellos sólo buscan quebrantar nuestra fe cristiana y nuestra sagrada moral incluso aliándose con gentes de otros planetas.

—Así, que según usted, en la conspiración judeomasónicocomunista y sodomita están metidas también gentes de otros planetas.

WKTS lo pensó un momento, para responder a continuación con contundencia.

—Por supuesto que sí.

La primera medida que adoptó el ministro tras despedir al señor Kassowitz fue la de llamar a capítulo a su secretario para echarle una bronca de las que marcan época. Luego, ya más calmado, instó a su colaborador a que organizara la vigilancia del supuesto periodista.

—Que me sigan a ese Kalinin... Seguro que es un agente de ese diablo de Stalin con la misión de confundirnos con estupideces sobre marcianitos, y así hacernos pasar por asnos.

El congreso eucarístico, mal llamado por los iconoclastas olimpiada de la hostia, se inició solemnemente el 27 de mayo de 1952. 'Toda Barcelona será un cáliz', anunciaba el ABC. En medio de la mediterránea luz iba a recortarse con geométricos perfiles de Hostia y Santo Grial un congreso universal de paz y fervor. En aquella jornada llegó a la ciudad condal el legado pontificio cardenal Federico Tedeschini, que actuó en nombre del papa Pío XII. Al día siguiente se presentó, imponente, el Caudillo, a bordo del crucero Miguel de Cervantes —pues venía de inaugurar el pantano valenciano de Cofrentes—, vistiendo el albo uniforme de capitán general de la Armada.

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